Saltar al contenido

▷ ¿Solidaridad o miedo? Perspectivas de la crisis social del coronavirus

Hace unos días me encontré una cosa por internet.

Es una opinión de un tal Carlos Barea. Me pareció interesante. Léelo y me comentas:

Resulta que ahora, dicen los titulares, hemos descubierto gracias al coronavirus que el ser humano solo puede sobrevivir gracias a la ayuda colectiva.

Pero yo me pregunto, ¿lo descubrimos con la pandemia del sida en los años 80 y 90?
Pues ya os digo yo que no, porque eso era cosa de maricones, de putas y drogadictos.

¿Aprendimos algo con la epidemia de Ébola en 2016?
Qué va, eso era para negros y para los que se metían en países que no debían.

¿Salimos a los balcones a aplaudir por los afectados de la crisis económica de 2008?
¿Para qué? Eso era asunto de pobres.

No nos engañemos, hemos descubierto la colectividad solo porque esta enfermedad ha golpeado de lleno a la crème de la crème de Occidente -todo eran risas cuando causaba estragos en China, ¿verdad?-.

Y, precisamente, por la democratización del virus hemos visto como cae el rico, el blanco, el hetero y el de la derechita cobarde.

Así que, de pronto, nos hemos visto amenazados y, de forma automática, se han puesto en marcha todos los mecanismos para salvaguardarnos.

Así que hemos descubierto esa supuesta colectividad solo porque somos una enorme cabeza neoliberal que se mueve al unísono y, si se toca uno de sus componentes, se derrumba la pirámide entera.

No, hijos míos, esto no es solidaridad colectiva. Es MIEDO.

Sí, la verdad sea dicha: nos hemos unido porque estamos cagados.

Porque con esto no solo pueden morir negros, maricones, inmigrantes o pobres.

Y porque, en realidad, nunca pensábamos que esto nos tocaría a nosotros, punta de la pirámide del privilegio.

Hemos creado esta cadena de unión internacional porque encima de todo no hay ningún colectivo al que culpabilizar y, ante la falta de cabezas de turco, nos hacemos arrumacos psicológicos y nos consolarnos unos a otros con resignación sin poder echar mierda por la boca.

Lo único que me gustaría es que esta crisis nos sirva para hacernos reflexionar, y no solo para montar festivales musicales en los balcones, tan necesarios para no darnos tiempo a pensar.

Si esto puede servir para algo, que sea para que, cuando salgamos de esta, dejemos de hacer burda ostentación de nuestros privilegios occidentales y miremos un poquito más hacia los márgenes.

(Carlos Barea)

 

Yo no estoy de acuerdo con todo lo que escribe el compañero Carlos.

Estoy de acuerdo con él en que el miedo está presente, que mucha gente se recluye por el miedo, que hemos visto medidas cuando la cosa se ha empezado a poner chunga para los más privilegiados también, etc.

No creo que todo el mundo sea insolidario.

Algunos sí, pero no todos. No caigamos en las opiniones absolutistas ni etiquetemos a todo quisqui.

La VERDAD sea dicha

No Carlos, tu opinión no es la verdad. Puedes acertar en algunos casos, pero no en todos. Ahí es donde creo que pierde su poder este texto, en su vanidad, en su totalitarismo (que a la vez critica), en si “yo tengo razón y sé cómo se tienen que hacer las cosas”.

Es evidente que hay cabreo al escribir, ese texto se escribe desde la frustración y la decepción (es bueno sacarlo, se le deben dar salida a esas emociones), pero cae en un infantil “todos tenéis la culpa menos yo”.

Sí, yo también me temo que después de esta crisis volvamos a lo de siempre y no haya mejoras permanentes en ciertos ámbitos de la sociedad.

Olvidamos muy deprisa, la historia nos ha demostrado en múltiples ocasiones que no se nos da muy bien transmitir ciertos aprendizajes a las generaciones posteriores.

He decidido compartir este texto, para invitar a una reflexión, que creo que eso lo hace muy bien. Es importante que reflexionemos sobre los factores que han participado de esta crisis (a nivel sanitario, económico, social, político) y tomemos decisiones a posteriori (cuando esté todo arreglado).

La cosa es que esto no se repita. O si se repite, que reaccionemos de manera diferente, que estemos más preparados. Porque nadie está preparado

Reflexionemos, eso sí que nos diferencia de los animales.

Por cierto

Ya que estás aquí, pásate por mi web www.luismiguelreal.es

Hay algo interesante ahí

Luis Miguel Real
¡Haz clic para puntuar esta entrada!
(Votos: 1 Promedio: 5)