
Muchas veces, una de las peores.
Cuidadín.
¿Y a qué te refieres Luismi con eso de la trampa de la motivación?
A eso voy
Los 5 trucos INFALIBLES para no perder NUNCA tu motivación
Los vendehumos y demás gurús de los libros de auto-ayuda nos venden estas mierdas y chorradas muy a menudo.
Todo el tiempo, básicamente.
¿Porqué? Pues porque vende bien, hacer grandes promesas siempre vende bien.
Aunque sea imposible vender eso que prometen. Es más prometiendo esas cosas, terminan de mostrar que en realidad no tienen ni idea de lo que están hablando.
Estupideces y poses a lo Superman como “las 7 +1 técnicas SECRETAS para estar siempre motivados y conseguir TODO lo que nos propongamos”.
Cosas de niños, para niños.
Puedes conseguir TODO lo que te propongas, SOLO necesitas crees en ti mismo
La motivación es como los cereales: al final se acaban y hay que comprar más
Nuestra capacidad de motivación / fuerza de voluntad / energía tiene sus límites.
Los gurús de internet (y algunos psicólogos de pacotilla que se forran a vender libros mierder) se benefician de vendernos la idea de que existen trucos mágicos para que las cosas no nos cuesten, que se haga todo en piloto automático, y que es posible pasarnos la vida entera en un estado continuo de éxtasis.
Y eso es mentira.
Una mentira asquerosa.
Luego la gente, cuando siente un poco de cansancio o pereza o lo que sea, se sienten culpables, porque se piensan que están haciendo algo mal, que no están siguiendo correctamente las enseñanzas del gurú que les dice que ser feliz depende solo de tu actitud, y que básicamente, si no estás siempre motivado, eres gilipollas. Porque según ellos puedes estar motivado en un instante, ¿porqué ibas a querer sentirte de otra forma, si es tan fácil?
Sí, hay mucho de tiranos fascistas en esos gurús, aunque lo visten todo de paz y amor y que somos seres de luz y dale a la meditación cuántica, que si no eres feliz, es que eres tonto, tontito, tontín.
El pesimista se queja del viento, el optimista espera que cambie, el realista ajusta las velas
Alguien
No todo es cuestión de ganas
Sí, las frases motivacionales de las redes sociales pueden animarnos y hacernos sentir guay a veces.
En muchos casos, de manera muy sutil, ese discurso de “si quieres puedes” puede volverse contra nosotros en forma de “es culpa mía no poder, hasta eso hago mal”.
Y desgraciadamente, no siempre depende todo de nuestra actitud.
Tener una actitud entusiasta ante la vida puede ayudarnos mucho, no lo niego. Pero todo el el éxito no siempre depende únicamente de nuestra actitud.
Utilizando una metáfora del gran psicólogo Víctor Amat, podemos ser un muñeco de nieve en un desierto. En unas circunstancias así, no hay cambio de actitud que nos pueda salvar, debemos salir pitando de ahí antes de derretirnos, cambiar nuestro contexto, cuanto antes.
Siempre, por muchas ganas que le pongamos a las cosas, existe la posibilidad de que nos salga más. No somos todopoderosos, los brokers de Wall Street lo saben, nadie puede predecir al 100% el mercado.
Puedes hacer las cosas cosas muy bien, y aún así cagarla.
¿Justo? ¿Injusto? No lo sé.
Es así.
No todo depende de nuestra actitud, el contexto es importante, y a veces habrá elementos del contexto que no dependerá de nosotros cambiar. Podemos, debemos cambiar elementos de nuestros contextos, pero no siempre va a estar bajo nuestra elección. A veces, simplemente, las cosas salen mal.
Si puedes soñarlo, puedes hacerlo
Yo sueño con ir a Marte a jugar al volleyplaya
Aprende a hacer lo que necesitas hacer sin que eso te motive, como si hubieras tomado algo ilegal
Es natural que nos sintamos motivados ante la novedad, ante el despegue de un nuevo proyecto, ante un cambio. Pero al final nos acostumbramos, la novedad se acaba y es difícil mantener siempre un flujo constante de novedad y variedad en todo lo que hacemos.
Que mola tenerlo, pero no siempre es posible (salgamos de nuestro ombligo y démonos cuenta de que existen múltiples contextos diferentes al nuestro, lo que yo puedo hacer o me funciona, no tiene porqué funcionarle al de al lado, por muy majo y listo que yo sea).
Los psicólogos comprobamos hace mucho que las personas que viven bien su vida (sin llegar a hacerse ricos ni famosos ni inmortales, con vidas la mar de sencillas y mundanas) son las personas que aprenden a sistematizar lo que hacen, y a hacer las cosas importantes, sí o sí, independientemente de que se sientan motivadas en el momento o no. Si tiene que ser hecho, lo hacen y ya está.
Esto pasa por revisarnos esa creencia de que “para ser capaz de hacer X, primero tengo que sentirme motivado / energético / con ganas”. Porque si te sientes así, pues de puta madre, pero si no te sientes así, ya puedes tener un problema (piensas que tienes un problema, y entonces sí que ya no lo haces).
Si me he propuesto ir al gimnasio por las mañanas (por la razón que sea), necesito reconocer que soy un ser humano y que aunque no quiera, voy a sentir de vez en cuando pereza / sueño / agujetas / frío mañanero / cansancio y muy natural y humanamente, voy a preferir quedarme en la cama un rato más.
Y lo conseguiré en el momento en que aprenda que “sentir pequeñas molestias de vez en cuando es parte del camino” y no aspirar a estar hasta arriba de éxtasis todos los días. Si me he propuesto ir al gimnasio X días a la semana, suena el despertador, me levanto y voy. Si no me apetece, me jodo y voy.
Pero claro, vende mucho más la idea de que puedes conseguir TODO lo que te propongas sin sentir cosas de humanos.
Sed humanos, por favor.
Que los vendehumos son robots y quieren que los demás se conviertan en robots también.
Por cierto, aquí puedes pillar de Amazon un libro muy antiwonderfulismo: “El arte de amargarse la vida”, del gran Paul Watzlawick
Psicoterapia de verdad, más que unicornios y promesas vacías
Si estás pasando por un mal momento personal, un buen profesional de la psicología puede ayudarte a mejorar las cosas. Si quieres saber más sobre las cosas que hago, vete a mi página web www.luismiguelreal.es y suscríbete a mis emails. Mando cosas muy chulas por ahí 😉