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▷ ¿La marihuana es adictiva? Adicción al Cannabis

¿De qué hablo en este artículo?

¿Me puedo hacer adicto al cannabis?

La adicción a la marihuana es real pese a que muchos ignoran las secuelas físicas de abstinencia y dependencia psicológica

Infobae

Mucha gente ignora que la marihuana es adictiva.

O quiere seguir engañándose pensando que no tiene peligro alguno.

Imagino que cada persona elige sus mentiras, no sé.

Por ejemplo, los colegas de Engrama Podcast me hicieron una entrevista hace un tiempo, sobre la adicción al cannabis

Pues un montón de gente (consumidores de marihuana, probablemente) empezaron a escribirles diciendo que “no era correcto hablar de adicción y marihuana

Yo flipaba, con lo engañadas que viven muchas personas, y la clase de bolas que se tragan.

Sí, el cannabis es adictivo. Y no porque lo diga yo, lo saben de sobra las personas que han trabajado conmigo en terapia por no poder dejarla sin ayuda.

Algo adictivo habrá ahí, digo yo.

Bueno, qué sabré yo, solo soy un psicólogo especialista en adicciones. Igual toda esa gente que pasa por mi consulta, no sé… pasaban por ahí.

En fin.

Por cierto, aquí la entrevista con Engrama Podcast de la que hablaba. Digo alguna cosa interesante y todo:

Por cierto, si lo que quieres es dejar la marihuana, sé bastante bien cómo hacerlo:

Los profesionales de la psicología o la medicina sabemos desde hace mucho que la marihuana es adictiva, y no mentimos a nadie.

Hay pérdidas de control ante el consumo, hay síndrome de abstinencia, hay ansiedad ante la retirada de la droga, hay dependencia psicológica, y produce o empeora otras enfermedades mentales. Sí, se puede desarrollar una adicción a la marihuana.

Es evidente que a muchos consumidores de marihuana les incomoda esa idea. Pero es la realidad. Negarla no va a cambiarla.

Por cierto, el poder adictivo de la marihuana también va aumentando con los años. Esto es por la creciente potencia (cantidad de THC) en las plantas genéticamente modificadas. Claro, si coloca más, se vende más. Y también se vuelve más adictiva.

Por supuesto, no es lo mismo dependencia que adicción, y no vale la pena que nos enganchemos en una discusión por definiciones.

Simplemente, cuanta más marihuana consumes, más probabilidades tienes de terminar enganchándote, y si te enganchas, lo tienes que trabajar con un profesional.

Es así.

Obviamente, existen diferencias entre el potencial adictivo del cannabis y el de otras drogas como el alcohol o la cocaína. Uno puede desarrollar dependencia por las otras dos mucho más deprisa que con la marihuana.

No, no es habitual que alguien se vuelva adicto a la marihuana después de un mes de consumo. Pero después de varios meses o años, por supuesto que sí.

No hay casos conocidos de personas que hayan muerto de una sobredosis de marihuana ni de los síntomas de abstinencia habituales (escalofríos, sudores, ansiedad, insomnio, irritabilidad, náuseas, etc), como sí ocurre con otras drogas (sabido de sobra).

Hay muchas personas que malinterpretan este último dato, y lo utilizan para auto-engañarse: que la gente no muera de sobredosis de cannabis, no significa que no sea peligrosa.

Son los daños cerebrales a largo plazo los que deberían preocuparte, pero ya llegaremos.

“Unos 2.7 millones de estadounidenses cumplen el criterio diagnóstico para considerar a una persona dependiente de la marihuana, detrás solamente de la dependencia del alcohol”

Nora Volkov, directora del Instituto Nacional de Abuso de Drogas

Hace años, la marihuana que compraban los adolescentes para hacerse porros tenía mucha menos potencia que ahora. Mucha gente sigue creyéndose esa historia y pensando que la marihuana es inofensiva. La realidad es que es cada vez se venden variedades con mayores niveles de THC (tetrahidrocannabinol), el principal ingrediente psicoactivo del cannabis.

Para que te hagas una idea, hace años la marihuana que circulaba por las calles solía tener concentraciones de THC del 4%, aproximadamente. Ahora es fácil encontrarte muestras con concentraciones de THC de entre un 40 y un 80%.

Eso es mucho.

Aún así, existe un “lobby fumeta” que insiste en contarle a la población la parte de la verdad que más les conviene, negando que exista adicción.

Claro, y la gente que ha venido a mi consulta de psicoterapia porque han tenido ataques psicóticos por estar fumando porros casi todos los días, y que aún así no pueden dejar de fumar… ¿me los he inventado yo?

Obviamente, a la persona que consume marihuana habitualmente, o que gana dinero vendiendo parafernalia de cultivo o camisetas… pues no le interesa esa idea de que la marihuana sea adictiva.

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¿Cuáles son los efectos del cannabis?

cannabis dejar de fumar marihuana 2

Si has fumado marihuana alguna vez, o has visto a gente fumándola, estarás familiarizada con los efectos más inmediatos

Relajación casi instantánea, aumento de las sensaciones, risa tonta, hambre, los ojos rojos y dilatados, casi como inyectados en sangre…

La marihuana que se distribuye es cada vez más potente

National Institute on Drug Abuse

Efectos del cannabis a corto plazo

Fumar cannabis también tiene efectos negativos a corto plazo, como por ejemplo:

  • Ansiedad, pánico, pensamientos paranoicos y vergüenza
  • Mala coordinación y equilibrio, lentitud de movimientos y capacidad de reacción
  • Aumento de la frecuencia cardíaca (taquicardias)
  • Náuseas y vómitos

Efectos del cannabis a largo plazo

Los efectos más peligrsosos a largo plazo de la marihuana son:

  • Adicción y pérdidas de control
  • Bronquitis y otras enfermedades respiratorias
  • Daños cerebrales y a nivel cognitivo (memoria, atención)
  • Ataques de pánico
  • Alucinaciones, paranoia o sintomatología psicótica

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¿Cómo saber si tengo adicción al cannabis?

Igual los adivinas, porque algunos pueden ser extremadamente obvios, incluso para los que dicen que “la marihuana no causa adicción”.

Para empezar, si ves que estás fumando más cantidad y más tiempo del planeado, puede que tengas un problema.

La clave de las adicciones está en las pérdidas de control. Si dijiste que solo fumarías esto, y luego terminas fumando más, y eso te pasa varias veces… estás perdiendo el control.

Los atracones son otro síntoma clave de una posible adicción. Los consumidores suelen inventarse excusas para justificar esos atracones, como “es que era una noche especial”, “es que me apetecía” o “¿me estás vigilando? no tengo porqué darte explicaciones”.

Como en toda adicción, llega un momento en que el consumo de marihuana termina desplazando o interfiriendo con otras actividades, como los estudios, el trabajo, otras formas de ocio que no tengan nada que ver con fumar, etc.

Si la persona prefiere fumar a hacer otras cosas que antes sí que le atraían o motivaban… es otro signo de un problema serio. La persona ha perdido la capacidad de elección.

Lo más escalofriante y angustioso muchas veces es el hecho de saber que el consumo le está haciendo daño, y aún así no poder parar.

Al principio, las drogas funcionan muy bien para la gente con enfermedades mentales.

Si tienes ansiedad, la puedes hacer desaparecer con un par de caladas o una cerveza. Como por arte de magia.

Pero, entonces, aparece la tolerancia, y no solo necesitas beber más para acabar con la ansiedad, sino que cada vez que intentas parar, la ansiedad empeora. Esto se conceptualiza como una trampa biológica. En un primer momento funciona, para después dejar de funcionar y seguir teniendo un problema

Doctor Alex Stalcup

¿En qué consiste el síndrome de abstinencia del cannabis?

El cuerpo desarrolla tolerancia a la sustancia ante el uso reiterado. Entonces, se necesitan cada vez dosis mayores para experimentar los efectos deseados.

A la vez, en los periodos de abstinencia (cuando no se consume la sustancia), la persona experimentar malestar y una serie de síntomas muy diferentes a los efectos buscados con la droga.

En el caso del cannabis, el síndrome de abstinencia suele provocar cambios de humor muy repentinos, irritabilidad, sintomatología depresiva, dolores de cabeza, pérdidas de apetito, problemas para dormir…

¿Es peligroso fumar cannabis?

El deseo irrefrenable de colocarte puede comprometer muchísimo tu calidad de vida.

Hay personas que han destrozado sus relaciones familiares o de pareja, porque han permitido que el fumeteo se entrometiese entre ellas y las cosas más importantes.

Míralo así: si te dijesen que tu pareja es alérgica a las alcachofas, probablemente no te costaría dejar de cocinar alcachofas en casa.

Si te insinúan la idea de dejar de fumar porros, o incluso solo de fumar menos, y te pones a la defensiva… igual tienes un problema. Porque estás eligiendo los porros sobre tus relaciones.

No dejarías que unas alcachofas se interpusieran entre tu pareja y tú. ¿Pero la marihuana?

¿Cómo puedo evitar hacerme adicto al cannabis?

Como con cualquier otra droga, no hay nada que sirva para absolutamente todos los casos.

Cada persona es un mundo, y hay que tener en cuenta tu historia de consumo, tu contexto vital, tu estilo de vida en general…

Si has llegado hasta este artículo, seguramente ya te preocupa tu consumo, o hayas experimentado algún atracón, o te hayas dado cuenta de que a lo mejor estás fumando demasiado a menudo…

Consulta con un especialista, eso es lo más sensato que puedes hacer en este momento. Si necesitas ayuda para superar una posible adicción al cannabis, necesitas un psicólogo especialista en adicciones.

Por cierto, si lo que quieres es dejar la marihuana, sé bastante bien cómo hacerlo:

Quiero dejar la marihuana

Luis Miguel Real
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