
10 Razones para Dejar de Fumar Marihuana
- Riesgo de psicosis y esquizofrenia
- Síndrome amotivacional
- Enfermedades respiratorias
- Evitarás problemas de ansiedad
- Evitarás caer en depresión
- Mucha más estabilidad emocional
- Más energía y ganas de hacer cosas
- Disfrutarás más de tus relaciones
- La marihuana es adictiva
- Dejarás de depender de una droga para disfrutar de tu vida
Artículo relacionado: ¿Qué le pasa a tu cuerpo cuando dejas de fumar marihuana?
1. Riesgo de psicosis y esquizofrenia
La marihuana puede aumentar el riesgo de psicosis, una enfermedad mental grave que se caracteriza por una descontrol del pensamiento, la percepción, la emoción y el comportamiento. Algunos de los síntomas de la psicosis incluyen:
- Alucinaciones
- Delirios
- Pensamientos extraños y angustiosos
- Cambios bruscos de humor
- Ideación suicida
Este riesgo es aún mayor si la persona tiene un historial familiar de psicosis o si comienzan a consumir a una edad temprana (sobre todo en la adolescencia). El THC, el componente psicoactivo principal de la marihuana, es el responsable de los efectos psicoactivos y es el principal responsable de esta relación entre el consumo de marihuana y el riesgo de psicosis.
Es importante destacar que las personas con psicosis pueden tener una recuperación más difícil y en algunos casos pueden quedar con discapacidad permanente, es por eso que es importante evitar riesgos. Desarrollar psicosis por el consumo de cannabis es una lotería genética, es muy difícil predecir qué personas van a tener problemas y cuáles no. El único consumo seguro de marihuana es 0.
2. Síndrome amotivacional
Mucha gente que fuma marihuana con frecuencia ve cómo se vida se va por el desagüe, perdiendo la motivación y la ambición, volviéndose personas pasivas que se dan pena a sí mismas (y muchas veces a los demás).
Algunos de los síntomas que se relacionan con el síndrome amotivacional incluyen:
- Apatía o falta de interés en las actividades cotidianas
- Falta de metas y proyectos a largo plazo
- Falta de energía, motivación y vitalidad
- Dificultad para concentrarse y tomar decisiones
- Pérdida de interés en las relaciones sociales
- Aumento en la tendencia a la procrastinación (posponer tareas o responsabilidades)
El síndrome amotivacional se relaciona con el THC, el componente psicoactivo principal de la marihuana, que actúa en el sistema endocannabinoide del cerebro, alterando los procesos neuroquímicos y psicológicos que regulan el estado de ánimo y la motivación.
Dejar de fumar marihuana hace que el síndrome amotivacional desaparezca en cuestión de semanas.
3. Enfermedades respiratorias
El consumo de marihuana puede causar problemas respiratorios (ya que se inhala humo y la mayoría de las veces se fuma con tabaco) que aumenta el riesgo de enfermedades respiratorias. Algunas de las enfermedades respiratorias que se relacionan con el consumo de marihuana incluyen:
- Bronquitis: Inflamación de los bronquios debido a la irritación del humo. Puede causar tos, dificultad para respirar y esputo.
- Neumonía: Inflamación del tejido pulmonar que puede causar fiebre, tos y dificultad para respirar.
- Enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC): es una enfermedad que afecta a las vías respiratorias y que se caracteriza por una dificultad progresiva para respirar debido a la obstrucción de las vías respiratorias.
- Cáncer de pulmón: El humo de cualquier tipo de tabaco, incluyendo el de la marihuana, contiene sustancias cancerígenas que aumentan el riesgo de cáncer de pulmón.
Es importante destacar que el riesgo de estas enfermedades respiratorias aumenta en proporción a la cantidad de marihuana consumida y si es consumida con tabaco. Dejar de consumir marihuana puede ayudar a prevenir estas enfermedades respiratorias y mejorar la salud respiratoria en general.
Es curioso que muchos consumidores de marihuana utilicen el argumento de que “fumar porros es más sano que fumar tabaco”, y cómo la evidencia científica nos va demostrando cada vez más lo falso de ese mito.
4. Evitarás problemas de ansiedad
El consumo excesivo de marihuana puede causar problemas de ansiedad, que pueden variar en gravedad y duración. Algunos ejemplos de problemas de ansiedad relacionados con el consumo excesivo de marihuana incluyen:
- Ansiedad generalizada: Es una sensación persistente de preocupación o inquietud, incluso cuando no hay ninguna amenaza aparente. Puede causar síntomas físicos como sudoración, palpitaciones y tensión muscular.
- Ataques de pánico: Es una reacción intensa de ansiedad que se desencadena repentinamente, y puede causar síntomas como palpitaciones, sudoración, mareo, sensación de ahogo y miedo a morir repentinamente.
- Brotes psicóticos: son episodios temporales de psicosis, con delirios, , paranoias, alucinaciones y pérdida de la conexión con la realidad. En algunos casos pueden ser el comienzo de una psicosis de por vida.
- Ansiedad Social: problemas para relacionarse con los demás, generando una sensación de incomodidad al interactuar con otras personas, intenso miedo a lo que van a pensar otras personas, paranoias, etc.
- Síndrome de abstinencia: Puede generar ansiedad, mareos, pesadillas, explosiones de ira y agresividad al intentar dejar de consumir marihuana después de un uso prolongado y recurrente.
5. Evitarás caer en depresión
Fumar porros puede causar problemas de depresión, que pueden variar en gravedad y duración. El cannabis es un depresor del sistema nervioso (y uno de los más potentes). Algunos ejemplos de problemas de depresión relacionados con el consumo excesivo de marihuana incluyen:
- Depresión mayor: Es un trastorno del estado de ánimo que se caracteriza por una tristeza persistente, pérdida de interés en las actividades cotidianas y alteraciones del sueño y el apetito.
- Trastorno afectivo estacional: Es un trastorno del estado de ánimo que se caracteriza por episodios de depresión que ocurren en una época específica del año, comúnmente durante el otoño e invierno.
- Baja autoestima: Es una valoración negativa y persistente de uno mismo, sentirse inferior a los demás, puede generar un sentimiento de tristeza y vacío.
- Pérdida de interés en las actividades diarias: Puede generar dificultad para disfrutar de las actividades que antes se disfrutaban, generando una sensación de aburrimiento, tristeza y apatía, así como perjudicar la vida laboral o académica de la persona.
- Pensamientos negativos: Puede generar una tendencia a pensar en cosas negativas, generando una sensación de tristeza y desesperanza casi constante.
Por cierto, si quieres profundizar en el tema, descárgate esta guía:
6. Mucha más estabilidad emocional
Muchas de las personas a las que he ayudado a dejar la marihuana me contaban cómo tenían problemas de ira y agresividad, cambios de humor bruscos e inexplicables que dificultaban mucho su día a día y su relación con las personas que querían.
Los problemas de inestabilidad emocional se deben a cómo la marihuana desequilibra los sistemas endocanabinnoides del cerebro, claves para la regulación emocional. Por suerte, la mayoría de síntomas desaparecen después de dejar la marihuana definitivamente.
Artículo relacionado: 15 trucos para dejar la marihuana (mucho más fácilmente)
7. Más energía y ganas de hacer cosas
Al dejar los porros tendrás muchas más ganas de hacer cosas, mucha más motivación para perseguir tus proyectos y crecer.
8. Disfrutarás más de tus relaciones
Lee es testimonio de Alejandro, quien dejó la marihuana después de más de 7 años de consumo diario:
Mi nombre es Alejandro, y quiero compartir mi experiencia sobre cómo mi adicción a la marihuana afectó a mi relación de pareja.
Durante varios años, fumé marihuana a diario, incluso antes de salir a trabajar o antes de ver a mi pareja. Ella comenzó a notar cambios en mi comportamiento y mi estado de ánimo, pero yo no la creía al principio.
Me volví apático e irritable, y perdí el interés en las actividades que solía disfrutar con ella (salir, viajar, compartir, etc). Mi pareja se quejaba de que no le prestaba atención ni me esforzaba en nuestra relación. Los porros se habían convertido en el centro de mi vida.
Mi consumo de marihuana también causó problemas de memoria y atención, lo que a menudo hacía que olvidara planes o compromisos que había hecho con ella.
Sentía ansiedad a menudo, llegué a tener ataques de pánico en situaciones sociales, lo que me llevó a aislarme, a quedarme en casa constantemente y a perder muchas amistades.
Mi relación empeoró cada vez más, hasta que finalmente mi pareja decidió dejarme, porque pensó que los porros eran más importantes que ella. Perdí a alguien a quien amaba por mi adicción a la marihuana. Desde entonces, he trabajado duro para dejar de fumar y recuperar mi salud mental y emocional.
Me siento un hombre nuevo, he iniciado una nueva relación y jamás me arrepentiré de mi decisión
9. La marihuana es adictiva
La marihuana provoca adicción, y eso es innegable a estas alturas.
Cuanto más fumes y más esperes, más te costará dejarlo después. Por eso, el mejor momento para dejar la marihuana siempre es ahora.
10. Dormirás mucho mejor
Algunas personas fuman porros antes de dormir pensando que les ayuda a dormir mejor, cuando en realidad lo que hace es empeorar su calidad de sueño. Cuando fumas marihuana, pasas mucho menos tiempo en la fase REM (sueño profundo), dejas de soñar y descansas menos. Es decir, te levantas con menos energía porque has descansado mucho menos, tu sueño no ha podido ser totalmente reparador.
Además, al depender de la marihuana para dormir, llega un momento en que la gente siente miedo ante la idea de no fumar ningún porro antes de dormir. Les da miedo sufrir insomnio, cuando es precisamente la marihuana la que les empeora el insomnio.
Cómo dejar los porros
¿Quieres dejar la marihuana? Soy un psicólogo especialista en adicciones, y he ayudado a miles de personas a superar sus problemas de adicción. Haz clic aquí abajo y te explicaré cuáles son los primeros pasos: